AQUÍ ENTRE NOS… De las buenas intenciones a la triste realidad

Maria Elena Yrizar Arias

Hace un año,   Juan Manuel Carreras al tomar posesión como gobernador electo de San Luis Potosí,   al pronunciar su discurso oímos a un Carreras convincente, conciliador con la clase política, que planteó dos ejes centrales en su discurso: la transparencia y la necesidad de combatir la corrupción, con lo que definió la dirección por donde llevaría su gobierno para sortear los problemas. Al parecer, Carreras parecía que sería inflexible ante cualquier forma de corrupción.

Ese compromiso se basó en la legalidad, que desde luego, es la responsabilidad de aplicarla y hacer que se respete, con el objetivo de que se mejorarán las relaciones de gobierno con los grupos sociales o la ciudadanía en general. En otras palabras, que el nuevo gobierno fuera eficaz desde un inicio, aunque haya recibido una herencia perversa.

Lo anterior, correspondía con el inicio de un gobierno, que tenía como antecedente a otro gobierno del Dr. Fernando Toranzo,  que a su vez, había dejado muchas heridas, agravios, injusticias que el nuevo gobierno debía de superar, para lograr una sociedad más avanzada, desarrollada, incluyente, con un gobierno transparente y que no le tiemble la mano para acabar con el deshonroso primer lugar de corruptela a nivel nacional. Las anteriores ideas habían sido expresadas por el gobernador Carreras y desde luego era la manifestación de las buenas intenciones que como punto de partida correspondían al reclamo generalizado de los potosinos, que se sentían agraviados.

La expectativa más importante fue en el sentido de que se comprometió a combatir la corrupción e impunidad. La anterior idea tenía una relación con las corruptelas ampliamente conocidas que se dieron con los funcionarios del gobierno torancista. Así que ingenuamente muchos creyeron que efectivamente se castigaría a los responsables de las triquiñuelas que se dieron por ejemplo en el DIF Estatal, y a un año de distancia, no ha habido nada concreto para ese combate.

El inicio del gobierno tenía un halo de grandes esperanzas para mejorar las cosas, así, quedo claro que las tareas más importantes eran: los combates a la pobreza extrema, mejorar la educación, acabar con la corrupción, mayor seguridad pública y fortalecer la trasparencia del gobierno, entre otros rubros no menos importantes. Para ello, busco a los mejores hombres y mujeres para lograrlo. Vinos a los nuevos junior en la política como nuevos funcionarios, a Arturo Esper Suleiman, en Turismo, a Ramiro Robledo López en la Secretaria de Comunicación y Trasportes, que no ha podido resolver el complejo problema de los taxistas en la capital, ni de los taxistas piratas y los conflictos entre ellos con el servicio de Uber. y Elías Dip Leos, en Agenda Pro San Luis. Los anteriores funcionarios son hijos de algunos personajes que han incursionado en la política. También incluyo a mujeres aguerridas como Lucia Lastras Martínez que ha convertido a la Dirección del Registro Civil como una dependencia eficaz que se ha acercado a la ciudadanía para resolver sus dificultades para corregir sus actas equivocadas por errores humanos. Así, hemos visto a la sobrina de Yolanda Eugenia González, a Cecilia González Gordoa, como Directora General del DIF reivindicando a esa institución al lado de la esposa del gobernador y eso es bueno para el nuevo gobierno.

Una de sus acciones fue la designación del procurador de Justicia y sus funcionarios en pos de reivindicar a la institución justiciera para erradicar la corrupción e inoperancia, el rezago de casos no resueltos graves, como el homicidio del presidente municipal de Matehuala, Édgar Morales Pérez, de hace cuatro años; la ejecución del alcalde de El Naranjo, Federico Safi, también, las múltiples cuentas públicas de administraciones anteriores municipales y un sinfín de casos graves sin resolver. Pero, no hemos sabido sobre los resultados de esas investigaciones. Hay que recuperar la credibilidad en las instituciones de gobierno.

En el aspecto económico , el gobierno está limitado, primeramente por la enorme deuda que dejo el anterior gobierno y en la actualidad, por los recortes de dinero que ha recibo el gobierno por los problemas económicos que existen a nivel nacional,, así que el orden y la disciplina presupuestal está en entredicho, cuando los salarios de los funcionarios y los gastos presupuestales están en las nubes, como ejemplo podemos citar a los salarios que se han designado los diputados del Congreso Local de 114 mil pesos cada uno mensualmente. Lo anterior enoja a la ciudadanía y vemos la mano dura que se dijo en un principio que se aplicaría.

Uno de los reclamos de la ciudadanía es la obra de infraestructura como carreteras, electricidad, pavimentos en las ciudades como la capital y Soledad de Graciano Sánchez, demandan pozos profundos, bordos de abrevaderos, redes de agua potable, escuelas con los servicios básicos. No existe un programa de austeridad que limite los gastos de los funcionarios.

Otro de sus dificultades que afectan al gobierno del estado, son las problemáticas que se dan al interior del Congreso Estatal con unos diputados que adolecen de seriedad y han confundido el recinto oficial como una plaza pública. En materia de trasparencia, no se puede acceder en forma eficaz al portal mismo.

El supuesto combate efectivo contra la impunidad que se anunció inmediatamente después de la toma de posición como gobernador, solo se cacaraqueó que se procedería judicialmente contra los gobiernos corruptos de Victoria Labastida y Mario García Valdez y resulto que las averiguaciones penales estaban mal integradas, y hemos visto a los funcionarios de esas administraciones estar bajo fianzas, tranquilos y muy presentes en los actos políticos tanto de los priistas como del gobernador mismo en su primer informe de gobierno. Ese combate, solo quedó en el discurso, porque en ese punto también en este aspecto no se avanzó realmente mucho.

Se ha progresado en convertir la zona del centro del estado en una gran potencia de inversiones extranjeras con empresas automotrices que generaran empleos, pero es positivo, pero las tareas son muchas y arduas. El balance da como resultado una triste realidad.

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