María Elena Yrizar Arias
Nadie podría pensar que las luminarias led no sean necesarias e indispensables. Es cierto que la capital potosina merece un alumbrado más eficaz, que en la práctica dejaría beneficios en el respectivo ahorro de energía eléctrica, más iluminación y alguna sensación de seguridad que tanto nos hace falta.
Desde hace varios días se ha visto en los medios de comunicación que, efectivamente, este tema de las luminarias y sus costos ha sido muy politizado y se han dado tantas opiniones que nos tienen confundidos. Pero, a lo mejor si tomamos en consideración algunas de ellas, podríamos formar un poco nuestro criterio. Por ejemplo, el diputado Jorge Alejandro Vera Noyola, en su calidad de presidente la Comisión de Puntos Constitucionales del Congreso del Estado, dictaminó a favor el proyecto integral que el ayuntamiento de la capital previamente habría entregado al Congreso, para arrendar 50 mil luminarias del alumbrado público en la ciudad y renovar el sistema de sodio a lámparas led, con un ahorro de hasta 50 por ciento en el pago mensual de este servicio.
Se debe puntualizar que la propuesta plantea una licitación para el cambio de luminarias de tipo led por un periodo de 15 años, con una inversión de 150 millones de pesos.
También informó que en la comisión se revisaron cinco asuntos, entre estos el relacionado al cambio de luminarias de tipo led, que fue votado a favor por la mayoría de quienes integran dicha comisión, por lo que en los próximos días pasará al pleno.
Marco Antonio Aranda Martínez, secretario del ayuntamiento de San Luis Potosí, aseguró este lunes que el proyecto de las luminarias led se encuentra dentro del marco legal. Pero, como a río revuelto, ganancia de pescadores, pareciera que así le está yendo a las autoridades, ya que según el funcionario capitalino hay quienes sólo están buscando “politizar” el tema para confundir a la opinión pública con mentiras, ya que él asegura que tanto el contrato original como el convenio modificatorio fueron aprobados por unanimidad por los dos cabildos, el anterior y el actual, además el contrato fue avalado de igual forma por la pasada Legislatura. Sobre las bondades del convenio propuesto, dijo que “los beneficios que se obtendrán gracias al convenio modificatorio, están a la vista de todos, se estableció un tope de la paridad cambiaria de 18 pesos, hay un plazo fatal de 120 días para la instalación de 47 mil luminarias de alta tecnología y en el caso de que la empresa no cumpla con los tiempos previstos, al gobierno capitalino no pagará un solo peso para acabar con el contrato”.
Lo que no nos aclaró el secretario es el hecho de que su presidente municipal, Ricardo Gallardo Juárez, inicialmente había declarado que cancelaría el contrato con la empresa Panavi, bajo el argumento de que era muy alto el costo de las luminarias, y en este momento tiene otro criterio. Lo que efectivamente confunde a cualquiera.
Aranda Martínez fue muy firme al negar que el nuevo sistema de iluminación de la ciudad vaya a generar un incremento de la deuda municipal, “al contrario, con los ahorros que se obtendrán por el menor consumo de energía eléctrica se estipula por escrito que serán utilizados exclusivamente para el pago de la deuda existente, que por cierto, también proviene de pasadas administraciones municipales”.
Por su parte, el diputado Óscar Bautista, al preguntarle ayer por la tarde al legislador sobre este asunto, enfáticamente dijo: primero comentarte que es un decreto de la anterior Legislatura votado por unanimidad y por petición del ayuntamiento de la capital. Hoy nos piden a nosotros modificar el decreto y también fue votado por unanimidad del Cabildo. La Comisión de Desarrollo Territorial recibió y votó por unanimidad dicha modificación. La Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales votamos y aprobamos dichas modificaciones con beneficio para los potosinos. El dólar se toma como base 18 pesos durante 15 años. En 120 días para instalar todas las luminarias. Asimismo, el mantenimiento durante los 15 años. Los remanentes de casi 400 millones van a un fideicomiso para pago de deuda de la capital. No hay inversión de ningún orden de gobierno.
Pero la legisladora Lucía Nava dice otra cosa: consideró que la propuesta para modificar el contrato no es viable, ya que “no existe ni materia de un contrato que sea vigente, entonces la cantidad es intrascendente cuando ni siquiera la vigencia de contrato pudiera ser real”.
Gallardo Juárez declaró ayer enfáticamente que “responsabiliza a los diputados que si ven algo que no está bien (con relación al convenio con Panavi), que le den para abajo”, ( lo que significa que no le den para adelante, sino que lo suspendan). Así las cosas, entre díceres de unos y contradíceres de otros, la legalidad deberá prevalecer. Por lo pronto, el Congreso estatal mejor optó por dejar pendiente el asunto, no lo tratarán hoy. Las dichosas modificaciones con beneficio para los potosinos, ni las conocemos ni las difundieron. Así, nos quedamos en la afirmación de que las luminarias y el ahorro, son indispensables.