El Ayuntamiento de San Luis Potosí, presidido por Ricardo Gallardo Juárez, continúa con el reordenamiento de anuncios y espectaculares no sólo para asegurarse de que cuenten con los permisos correspondientes, y evitar la contaminación visual en la Ciudad capital, sino para garantizar que las estructuras cumplan con las medidas de seguridad para evitar riesgos a la ciudadanía.
Por ello, la responsable de Comercio Municipal, Dolores Eliza García Román dio a conocer que continúan los operativos para regularizar, pero también sancionar e incluso retirar publicidad no autorizada por el Gobierno capitalino. Tan sólo en las últimas semanas se ha procedido a la clausura de más de 25 anuncios, principalmente espectaculares.
El más reciente se llevó a cabo sobre la Avenida Salvador Nava, donde incluso se procedió al retiro de estructuras debido a que sus propietarios no cuentan con los permisos correspondientes, emitidos por el Ayuntamiento de San Luis Potosí, y que estas supervisiones se realizan en otros puntos de la Ciudad, entre los que sobresalen las principales arterias, donde se coloca más publicidad de este tipo.
“A fin de cumplir con la encomienda del Presidente Municipal, Ricardo Gallardo Juárez de ser un gobierno abierto al diálogo, primeramente a los propietarios de los anuncios se les da oportunidad de regularizarse; si hacen caso omiso se procede a la clausura, pero una vez más se le cita para que cumplan con las exigencias municipales, y si aun así no acatan la ley, se procede al retiro”.
La funcionaria municipal mencionó que se han detectado casos en los que dueños de espectaculares llevan siete años o más, sin respetar los lineamientos marcados por la autoridad, entre los que destacan la ubicación entre anuncio y anuncio, así como las dimensiones permitidas, entre otros.
García Román insistió en la disposición y apertura de Comercio Municipal para continuar con la regularización de anuncios, no obstante, en caso de que se mantenga la resistencia, la ley contempla sanciones económicas que alcanzan hasta los 500 salarios mínimos.